miércoles, 29 de julio de 2015

Wikileaks: Rospigliosi pidió intervención contra Humala





El documento sostiene que el es ministro del Interior durante el gobierno de Alejandro Toledo, Fernando Rospigliosi , buscó en 2005 el apoyo de la Embajada en una campaña contra el candidato nacionalista Ollanta Humala .
Redacción. La República.pe 

Según un cable filtrado por Wikileaks , Rospigliosi estaba acompañado por Rubén Vargas, exdirector de la Defensa Nacional. Por entonces, ambos trabajaban en una consultora contratada por la sección antinarcóticos de la Embajada.

A pesar de compartir la inquietud de los exfuncionarios ante el avance del candidato nacionalista en las regiones cocaleras, el embajador estadounidense, James C. Struble , rechazó implicarse "en campañas de información o comentarios antiHumala" 

Según un cable diplomático fechado el 29 de noviembre de 2005 , Rospigliosi y Vargas se reunieron con los consejeros políticos de la Embajada 11 días antes.

En dicho encuentro, Rospigliosi describió a Humala como un capitán retirado que tenía la mentalidad del "típico militar" "poca comprensión de los matices políticos" . En cambio, aseguró que su esposa Nadine Heredia, licenciada en periodismo, sabía cómo comunicarse con el público y ejercía "una considerable influencia sobre él" 

Rechazan entrometerse en campaña 

En sus comentarios finales, el embajador Curtis Struble aseguró que compartían las preocupaciones de Rospigliosi y Vargas sobre el despunte de Humala en las encuestas y que de llegar al poder asentara una base proEvo y proChávez. Sin embargo, aseguró que ellos no podrían meterse en la campaña electoral, “eso le corresponde a los partidos” 

En cambio, el embajador estadounidense sí estuvo de acuerdo en dar seguimiento a las noticias sobre Humala en las regiones cocaleras, "dada su política a favor de la coca y la probabilidad de que se alíe con organizaciones cocaleras" 

En la misma línea, Struble definió al candidato nacionalista como "fascistoide" , quien podría convertirse en correa de transmisión de Hugo Chávez y su revolución bolivariana 

Como se recuerda, Humala ganó la primera vuelta, con un 25% de los votos, y perdió en la segunda frente a Alan García. Actualmente busca llegar al sillón presidencial con la alianza Gana Perú, y las encuestas le dan alrededor de un 10% de los votos. 

Datos: 

- El documento sostiene que fue Fernando Rospigliosi quien pidió el apoyo en el 2005. Sin embargo, este ya no era ministro de Toledo en ese año.

- En el 2005 Rospigliosi trabajaba para el capital humano Social (CHS) , consultoría que fue contratado por la NAS para proporcionar comunicaciones de apoyo en los esfuerzos anti-narcóticos y lucha contra la trata de personas. 

Rospigliosi pidió ayuda a EEUU

Para frenar a Ollanta Humala. junto a Rubén Vargas acudieron a embajada en noviembre de 2005. Cable entregado por Wikileaks señala que ex funcionarios del gobierno de Toledo solicitaron ayuda a EEUU para frenar avance de nacionalista. 


Un cable filtrado por Wikileaks relata que en noviembre de 2005 –ad portas de iniciar la campaña presidencial– Fernando Rospigliosi, ex ministro del Interior del gobierno de Alejandro Toledo, y Rubén Vargas, ex director de Defensa Nacional de la misma gestión, acudieron a la Embajada de Estados Unidos para solicitar ayuda para frenar el avance electoral de Ollanta Humala. 

El documento dado a conocer por el diario español El País aparece luego que el último martes 16, el postulante por Gana Perú asegurara que Alejandro Toledo –durante su gestión como presidente– intervino en la campaña contra su candidatura, información que –sostuvo– le fue proporcionada por la actual embajadora estadounidense, Rose M. Likins, quien negó al día siguiente tal versión. 

¿Qué contiene el cable? 

Según el documento con fecha 29 de noviembre de 2005, once días antes Rospigliosi y Vargas se reunieron con los consejeros políticos de la embajada, cita en la que expresaron su preocupación “sobre las perspectivas de que el ultranacionalista Ollanta Humala se estableciera como una fuerza política en el Perú”, señala el documento. 

Debido a ello –continúa– Rospigliosi y Vargas sugirieron al gobierno de Estados Unidos “revisar sus opciones” y plantearon dos propuestas: que la sede diplomática amplíe sus comunicaciones con el fin de que la empresa de comunicación Nexum monitoree la cobertura de Humala y promueva “noticias anti Humala en las regiones de coca”. 

El cable redactado por el entonces embajador estadounidense James C. Struble precisa además que Rospigliosi y Vargas informaron que Humala tenía su base política en las zonas fronterizas del norte y sur del país, donde propalaba sus “sentimientos antichilenos y antiecuatorianos”. 

Asimismo, el embajador Struble narra como ambos ex funcionarios del gobierno de Toledo temían el ascenso de Evo Morales a la presidencia de Bolivia, debido a que este podría tener un efecto rebote en nuestro país y contribuyera a la candidatura de Humala. Como se recuerda, Morales efectivamente ganó las elecciones en el vecino país en diciembre de 2005. 

En tanto, agrega el diplomático que Rospigliosi y Vargas consideraban que Ollanta trataba de presentarse como el “moderado” de los Humala, al recordar que su hermano Antauro Humala lideró una rebelión etnocacerista en Andahuaylas, que, se recuerda, terminó con la vida de cuatro policías. 

Presencia de Nadine Heredia 

El cable se refiere a la referencia de Fernando Rospigliosi sobre la esposa de Ollanta Humala, Nadine Heredia. El diplomático describe que la considera una persona que “ejerce una influencia considerable sobre su marido”. 

“Ollanta es un típico militar en su pensamiento y tiene poco conocimiento de matices políticos. Por el contrario, su esposa es producto de una familia de clase media, estudió periodismo en la Universidad de Lima, tiene un sentido mucho mejor de cómo comunicarse con el público”, escribe Struble so-bre lo dicho por Rospigliosi. 

El cable diplomático indica además que en esa fecha, Fernando Rospigliosi (ver entrevista) y Rubén Vargas trabajaban en la consultora Capital Humano y Social (CHS), contratada por la Sección de Asuntos Narcóticos, NAS (por sus siglas en inglés), de la Embajada de los EEUU, que proporcionaba información sobre este rubro. 

El cable finaliza con el comentario del embajador Struble que indica que, si bien la sede diplomática estadounidense comparte “muchas de las preocupaciones de Rospigliosi” sobre el despunte de Humala en las encuestas y en relación a que una eventual victoria suya significaría asentar en el Perú una base “pro Evo y pro Chávez”, ellos no tenían intención de intervenir en la campaña. 

“No tenemos intención de involucrar a la embajada en contra de Humala con campañas de información: que es una tarea de los partidos políticos rivales”, escribió el diplomático. 

No obstante, Struble se muestra de acuerdo con brindar seguimiento a las noticias sobre el líder nacionalista en las regiones productoras de hoja de coca, “habida cuenta de sus políticas en favor de la coca y la probabilidad de que va a formar alianzas con organizaciones cocaleras”, redactó. 

En esa misma línea, el ex embajador de Estados Unidos en el Perú muestra su preocupación por el problema que supondría la victoria de Humala Tasso en la lucha antidrogas de su país. Struble califica a Humala de “fascistoide” y teme que podría convertirse en un transmisor de la ideología del presidente venezolano Hugo Chávez. 

La información aparecida en El País hace referencia a otro cable de fecha 22 de noviembre de 2005, documento en el que el ex embajador estadounidense informa sobre cómo el Perú –con sus altos índices de pobreza y su decepción en el gobierno– puede ser terreno fértil para los planes de Chávez, en relación a expandir su “revolución bolivariana”. 

Struble, además, deja en evidencia su escepticismo sobre los intentos de Humala Tasso de ubicarse en el “centro político”, al referir que el nacionalista se ha desmarcado del etnocacerismo, pero aún considera a Chávez “un ejemplo democrático”. 

“Sobresale como un faro, un outsider que sirve de comodín y cuyo carisma atrae por igual a los fascistas y a los marxistas”, dijo.


Rospigliosi explica su visita a la embajada norteamericana

"Dice Humala que yo fui a la embajdada, por encargo de Alejandro Toledo , para pedir que hicieran una campaña en contra de él. Falso. Ollanta ha tergiversado y manoseado el cable de Wikileaks ", escribe en su columna del día, Fernando Rospigliosi .

Por Fernando Rospigliosi 
frospigliosi@larepublica.com.pe

Un cable de Wikileaks ha sido tergiversado y manoseado por Ollanta Humala tratando de usarlo para darle impulso a su languideciente candidatura. Dice Humala que yo fui a la embajada norteamericana, por encargo del entonces presidente Alejandro Toledo, a pedirles que hicieran una campaña contra él. Falso. Basta leer el cable, publicado primero por el diario español El País y ayer por La República, para darse cuenta de la mentira de Humala. 

Lo que ocurrió 

En primer lugar, Rubén Vargas y yo no fuimos a la embajada a pedir nada. Funcionarios de la sección política nos invitaron a almorzar a un restaurante para conversar sobre la coyuntura política, las elecciones y el narcotráfico. El embajador de los EEUU no estuvo presente. 

En segundo lugar, esas reuniones son frecuentes entre funcionarios de la embajada norteamericana –y de otras embajadas– con periodistas y analistas, sobre todo en períodos electorales. Después de la reunión, los funcionarios elaboran un informe y lo envían a Washington.

Eso es archiconocido para cualquiera de los muchos periodistas y políticos peruanos que han participado en esas reuniones, incluyendo, por supuesto, a Ollanta Humala y sus adeptos. 

En tercer lugar, en esa reunión Vargas y yo expresamos claramente nuestras opiniones sobre el riesgo que significaba Humala, como un agente de Hugo Chávez, para la estabilidad económica y la democracia peruana, sobre todo teniendo en cuenta el inminente triunfo de Evo Morales en la vecina Bolivia. 

En cuarto lugar, conversamos específicamente sobre la situación de los valles cocaleros, donde Humala trataba de acercarse a los productores de coca ilegal vinculados al narcotráfico, y donde los enviados bolivianos, con el cuento de la fraternidad de gremios cocaleros, hacían activismo político. 

Los funcionarios de la embajada preguntaron si, además de nuestro análisis, teníamos sugerencias, y les planteamos dos: ampliar el monitoreo de medios a la situación política y no solo a los temas de coca ilegal; y ayudar a combatir la campaña de los humalistas pro coca ilegal.

Por lo demás, esas y otras opiniones las manifesté públicamente en artículos y entrevistas a lo largo de esa campaña electoral, criticando claramente a Humala y el peligro que significaba para la estabilidad económica y la democracia peruana. Por supuesto, hoy día me ratifico plenamente en todo lo que dije en esos meses. 

Por último, en ese momento, noviembre del 2005, yo no tenía ninguna relación con Alejandro Toledo ni su gobierno. Desde mayo del 2004 no hablé con Toledo hasta hace muy poco tiempo. Tampoco tenía ninguna relación con su gobierno, al que yo criticaba públicamente en varios aspectos. 

En suma, esa reunión la tuve con los funcionarios norteamericanos a título personal y no como enviado ni en representación de nadie. 

Hipocresía 

Conocido el cable, Humala ha mentido sistemáticamente, tratando de aprovecharlo electoralmente para perjudicar a Toledo. Eso no sorprende a nadie. Lo que sí resulta asombroso es la hipocresía y el fariseísmo de muchos políticos que, en innumerables oportunidades, han acudido a la embajada norteamericana a solicitar favores o a pedir su directa intervención en diversos asuntos del país, y que ahora se rasgan las vestiduras ante un supuesto pedido de intervención.

Por ejemplo, según uno de los cables de Wikileaks, Jorge del Castillo fue –él sí en nombre del Apra– a pedir a la embajada que presione a Lourdes Flores para que se retire de una vez y apoye a Alan García en la segunda vuelta del 2006. 

O Salomón Lerner Ghitis, que fue a tratar de convencer al embajador norteamericano en 2006 que Humala era una buena persona y que no amenazaba sus intereses. 

Y el propio Humala, que acudió varias veces a la embajada, entre otras cosas, para pedirles que le permitan viajar a los EEUU. 

Humala, seguidor de Hugo Chávez el 2006, ahora ha intentado conseguir el padrinazgo de Lula y ha viajado varias veces a Brasil a tomarse fotos con el ex presidente y a solicitar su apoyo que, al parecer, se ha concretado en algunos asuntos. No con la munificencia de Chávez, por cierto. Pero algo es algo. 

EEUU interviene 

Lo más importante es el fariseísmo de los políticos que se rasgan las vestiduras ante la intervención extranjera, cuando la mayoría de ellos la recibió con beneplácito en muchas épocas no tan lejanas.

Por ejemplo, cuando el gobierno norteamericano, encabezando a la comunidad internacional, impuso a la dictadura de Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos la realización de elecciones para restablecer el Congreso, en mayo de 1992. Como se sabe, la dictadura no tenía eso en sus planes. Querían gobernar sin contrapesos, al estilo de las dictaduras tradicionales. 

Eso permitió, por lo menos, algunos ámbitos para que actuara la oposición política y existiera alguna libertad de prensa. 

O en el año 2000, cuando después de la venta de armas por cocaína a las FARC colombianas que hizo Montesinos, avalado y defendido por Fujimori, la presión norteamericana se convirtió en uno de los factores decisivos de su caída. 

En todo ese período, la década de 1990, muchos de los políticos que hoy se rasgan las vestiduras –incluidos izquierdistas que están con Humala y se atreven hoy a levantar la voz– acudían no solo a la embajada de los EEUU en Lima a reclamar una mayor injerencia norteamericana en los asuntos peruanos, sino viajaban a Washington, visitaban el Departamento de Estado, el Congreso y el Senado, pidiendo ayuda para acabar con la dictadura.

Y hoy dicen “qué horror, Rospigliosi habló con funcionarios de la embajada contra Humala, qué espanto”.

Qué caraduras.


Rospigliosi no descartó ser parte del equipo de campaña de Keiko Fujimori




El exministro del Interior Fernando Rospigliosi no descartó llegar a formar parte del equipo de campaña de Keiko Fujimori con miras a las elecciones presidenciales del 2016.

En canal N, el exministro confirmó que sí se reunió con la lideresa del fujimorismo para conversar sobre temas de seguridad ciudadana, Rospigliosi precisó que si bien ahora no es parte de su equipo de campaña, está abierto a conversar con otros candidatos.

En esa línea, y tras recordar que fue un opositor al régimen de Alberto Fujimori, el exministro cuestionó la idea de que Keiko sea culpable de los pecados de su padre.


"Keiko Fujimori no es igual a su padre y no se le pueden atribuir sus errores", de esta manera Fernando Rospigliosi, ex ministro del Interior de Alejandro Toledo, dejó entrever que pasaría a formar parte del equipo de campaña de la lidereza de Fuerza Popular en las próximas elecciones presidenciales 2016.

"No hay que decir: de esta agua no beberé", dijo Fernando Rospigliosi dejando entrever que si formaría parte de fujimorismo, aunque no lo ha querido confirmar aun.

"Creo que es una persona moderna, demócrata y que tiene una serie de capacidades. [...] No nos cerremos en odios que son inconducentes porque así no vamos a resolver ningún problema", acotó.



Entretanto aseguró que si ha dialogado con Keiko Fujimori y que le ha planteado una serie de propuestas sobre temas de seguridad y que hará lo mismo con los candidatos principales a fin de que se comprometan con un programa de seguridad que se ha desbordado en este gobierno.

El anuncio llama la atención pues en el pasado Fernando Rospigliosi aseguraba que Keiko Fujimori carecía de cualidades políticas. Aunque, en el 2011, confesó que votó por ella en la segunda vuelta electoral porque desconfiaba de Ollanta Humala.


Asimismo advirtió, en el programa de TV "No culpes a la noche", que los candidatos a la presidencia de la república deben ponerse de acuerdo en temas fundamentales, como la seguridad ciudadana, "la cosa se va a poner a un nivel incontrolable", dijo.

FERNANDO ROSPIGLIOSI: EVENTUAL GOBIERNO DE KEIKO INDULTARÍA TAMBIÉN A MONTESINOS



EL RINCÓN DE LOS RECUERDOS

Fernando Rospigliosi escribió ayer en El Comercio cuestionando la supuesta “guerra sucia”, que según él, el diario La República ha iniciado contra Keiko Fujimori por el tema de su patrimonio. Coincidentemente, un memorioso lector trajo a colación las declaraciones que brindó el exministro del Interior al programa “No hay derecho” de Ideeleradio el 16 de diciembre de 2010. A continuación, reproducimos lo publicado en el blog de dicho programa.

Ideeleradio.- Un eventual gobierno de Keiko Fujimori terminará indultando no solo al ex mandatario Alberto Fujimori, sino también a Vladimiro Montesinos, porque el ex asesor presidencial buscará negociar su libertad recordándoles a los miembros de Fuerza 2011 todos los hechos de corrupción que se cometieron en la década pasada, sostuvo el ex ministro del Interior, Fernando Rospigliosi.

Fue al referirse al mensaje que dejó Montesinos Torres en su cuenta de Facebook, a través de su abogada Estela Valdivia, en el que señala que se sentía “aburrido” por los encargos que Alberto Fujimori le ordenaba cuando Keiko vivía en Boston, en alusión al dinero que habría recibido para financiar sus estudios en los Estados Unidos.

“Naturalmente [esta elección] es la gran oportunidad de Montesinos, se le han abierto las puertas del cielo y probablemente se le abran las puertas de la cárcel también si gana Keiko Fujimori, porque Montesinos sabe tanto de la corrupción de su padre [Alberto Fujimori], de la familia y de todos los allegados que están hoy día regresando en las planchas y en las listas de Fujimori en lo que presentaron el otro día, que probablemente vaya a negociar su libertad con un eventual gobierno de Keiko Fujimori”, manifestó en el programa No Hay Derecho de Ideeleradio.

“[Montesinos] conoce mucho sobre la corrupción de ese régimen y de la propia Keiko Fujimori y con eso podría fácilmente chantajearlos. Así que yo creo que en el hipotético caso de que ganara Keiko Fujimori no tendríamos un indultado, Alberto Fujimori, sino dos indultados, Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos y probablemente más. Si este gobierno indultó a [José Enrique] Crousillat en el gobierno de Keiko Fujimori tendríamos una hemorragia de indultos”, agregó.

Rospigliosi Capurro advirtió, además, que Fuerza 2011 negociaría el porcentaje que obtendría en la primera vuelta con el fin de buscar negociar la libertad de Alberto Fujimori, recluido actualmente en la Diroes tras ser hallado responsable de actos de violación de derechos humanos.

“Sin duda eso también va a ocurrir [esa negociación de su 20%], si es que no gana también su objetivo es ese, la liberación de Fujimori y otros corruptos probablemente, pero veremos porque habrá que ver cuál es la composición del siguiente Congreso y cuál es el candidato que tiene posibilidades de ganar, en fin depende de muchos factores, pero esa posibilidad está presente”, apuntó.

Keiko y Yoshiyama se quedarían mansitos como gatitos

En otro momento, estimó que la aspirante presidencial de Fuerza 2011 seguiría los pasos de Jaime Yoshiyama, pues estimó que el candidato a la segunda vicepresidencia se quedó “mansito como un gatito”, después de que Montesinos Torres mencionó –a través de Estela Valdivia – en su cuenta de las redes sociales, que está privado de su libertad, pero no de sus recuerdos. Días atrás, Yoshiyama Tanaka mencionó que se alejó del gobierno de Alberto Fujimori porque tuvo “discrepancias insalvables” con el ex asesor.

“Probablemente Keiko Fujimori siga el mismo camino que su compañero de plancha Yoshiyama. Montesinos le pegó un sopapo a Yoshiyama con esto de que él sabía cosas acerca de lo que ocurrió en el gobierno de Fujimori y Yoshiyama se ha puesto mansito como un gatito, después del sopapo que le dio Montesinos”, declaró.

“Probablemente Keiko Fujimori ahora también tenga mucho más cuidado en referirse a Montesinos, seguramente ya no la veremos tan agresiva, porque Montesinos le ha recordado que el propio Montesinos era el que desviaba fondos del Estado para pagar de manera ilegal los estudios de Keiko Fujimori y de sus hermanos en los Estados Unidos, estudios que costaron cientos de miles de dólares y que no salieron del bolsillo de su ‘papito’, sino salieron de las arcas del Estado”, apuntó.

Es paradójico que Fujimori se presente como defensores de FFAA

En otro momento, consideró que el último cable diplomático de Estados Unidos filtrado por WikiLeaks, respecto los niveles de corrupción en las Fuerzas Armadas durante el gobierno de Alberto Fujimori, confirma que ese régimen corrompió en niveles nunca antes vistos a los institutos castrenses.

El ex embajador de los Estados Unidos en el Perú, James Curtis Struble (2004-2007) mencionó en un informe remitido a su país que el peor caso de latrocinio fue la compra de los aviones MiG-29 y Su-25 a Bielorrusia.

“La primera conclusión es que uno de los gobiernos que más daño le ha hecho a las Fuerzas Armadas en los 200 años que tiene el Perú como República es el de Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos y es paradójico que esta gente se presente ahora como los mejores defensores de las Fuerzas Armadas”, refirió.


“Este cable que envía el embajador norteamericano no es en este caso una opinión, sino que está basado en hechos que se descubrieron luego de la caída de la dictadura del 2000: Los cientos de millones de dólares en coimas que habían cobrado los altos mandos del Ejército y de la gente del gobierno de Fujimori, por las compras de armas, en el caso que se menciona son 18 aviones MiG 29, 18 Sukhoi 25 a Bielorrusia y 3 aviones MIG 29 a Rusia”, concluyó.

Guerra sucia, por Fernando Rospigliosi



La guerra sucia se puede volver contra sus promotores si es respondida rápida y eficientemente.

Fernando Rospigliosi
Analista político

Hace poco Augusto Álvarez Rodrich vaticinaba amargamente en “La República” que lo que nos espera en las próximas elecciones será muy feo: “La temática central de la campaña que viene serán las acusaciones a los candidatos presidenciales, lo que impedirá que temas medulares como la educación, la salud o la inseguridad ingresen a la agenda, aunque es cierto que la lucha anticorrupción también constituye un tema capital”. (“Ciudad de M”, 23/7/15).
Tiene razón. Muchos podrían llegar a esa conclusión luego de analizar algunas carátulas y reportajes de “La República” en los últimos días.

El martes pasado ese diario publicó un gran titular en portada: “Keiko dobló su patrimonio en un año”. Y en un extenso reportaje, Ángel Páez y Melissa Goytizolo intentaban demostrar con guarismos y declaraciones juradas ese sensacional descubrimiento asegurando que “los números no mienten”. (“El 2011 Keiko Fujimori reportó cifras diferentes de su patrimonio”, 21/7/15).

Inmediatamente los parlamentarios humalistas cayeron sobre Fujimori exigiendo investigaciones en el Congreso y el Poder Judicial. 

Al final, resultó que la información era falsa, que los números manipulados sí mentían. En realidad, habían mezclado soles con dólares e inflado imaginariamente el patrimonio de Fujimori. El subdirector de “La República” lo reconoció en una pequeña nota publicada en la página editorial de ese diario: “La información sobre el patrimonio de la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, consignó un error”. Y luego afirma que “nada de ello, sin embargo, cambia nuestra posición sobre el fujimorismo”. (“Sobre Keiko y algo más”, 23/7/15).

Algo parecido ha sucedido con otra serie de reportajes de ese diario en los últimos días referidos al esposo de Fujimori, Mark Villanela, donde han mentido para ensuciarlo. (Ver entrevista a Villanela en “Correo” 25/7/15, “He tenido S/.500 mil de utilidades el 2014”).
Naturalmente “La República” tiene todo el derecho de ser antifujimorista y criticar todo lo que considere equivocado. También, por supuesto, de investigar los puntos oscuros de la candidata y su partido. Nadie discute ese derecho. Pero eso es una cosa y otra muy distinta difundir información falsa para desacreditar a un candidato. 

Lo que está ocurriendo es que el gobierno y sus partidarios han sentido el golpe de las continuas revelaciones de las cuentas y gastos sin aclarar de Nadine Heredia, familiares, amigas y socios. E intentan manchar a los líderes opositores con denuncias similares. Estaría muy bien si tuvieran fundamento, pero si son acusaciones artificiales e infundadas, es guerra sucia.

En las campañas electorales se usan los mensajes positivos y negativos. Pero estos últimos, que son legítimos, no deben confundirse con guerra sucia. El mensaje negativo pone en evidencia las deficiencias de un candidato, de su entorno o su partido. La guerra sucia consiste en difundir imputaciones mentirosas y arteras contra los adversarios.

Un muestra de lo último es lo que hizo Vladimiro Montesinos con la prensa amarilla que controlaba para favorecer la candidatura de Alberto Fujimori el año 2000, difamando sistemáticamente a los adversarios como Alberto Andrade, Luis Castañeda y Alejandro Toledo, a congresistas como el entonces director de “La República” Gustavo Mohme Llona y a periodistas de ese diario como Ángel Páez. 

Un ejemplo de mensaje negativo exitoso es el que difundió la campaña de Alejandro Toledo contra Alan García el 2001. Cuando los errores del candidato de Perú Posible causaron su rápida caída en las últimas semanas, la campaña recordó profusamente a los peruanos los desastres del gobierno de García, la hiperinflación, la escasez, las colas, el terrorismo, etc. No hubo inventos ni mentiras, solo destacar los desatinos del adversario. Los números se invirtieron muy rápido y Toledo ganó cómodamente.

O como la de García contra Ollanta Humala el 2006, identificándolo con su padrino de aquel entonces, el dictador venezolano Hugo Chávez.

En nuestro medio –y en muchos países– es común la idea que la guerra sucia es muy eficaz para destruir adversarios y algunos candidatos se dedican predominantemente a eso. No obstante, los mejores consultores políticos rechazan esa especie.

Los electores –sostienen– votarán finalmente por quien tenga propuestas que consideren los ayudará a mejorar su vida cotidiana, para lo cual es fundamental el mensaje positivo. La guerra sucia se puede volver contra sus promotores si es respondida rápida y eficientemente. El punto es que eso no siempre ocurre y entonces sí tiene efecto.


Deja de quejarte


Renato Sandoval Gonzáles
Opinión Diario Correo
 29 de Julio del 2015 - 09: 18Trujillo

Muchos hablan del amor por el Perú, pero a pocos les gusta hacer patria. Dicen felices Fiestas Patrias, pero en feriado largo se van a chupar como si el mundo se acabara y terminan orinando en la calle o botando las botellas de licor en los parques y las playas. Esa es una manera salvaje de querer al país.

Quienes te dicen felices Fiestas Patrias se quejan del Presidente de la República por no haber dicho lo que quisieran haber escuchado, pero no votaron por él ni en la primera ni en la segunda vuelta. Otros, peor aún, eligieron a Ollanta Humala creyendo en la gran transformación del Estado y este les pegó una patada en el trasero.

Miles se quejan de la falta de seguridad en las calles, de la basura y los huecos en las pistas, pero no desean pagar impuestos. Anhelan que el Estado les dé todo gratis por el solo hecho de haber nacido en esta hermosa tierra del sol. Otros cantan: tengo el orgullo de ser peruano y soy feliz, pero cuando se miran al espejo lamentan no ser blancos ni altos y sí cholos y chatos. ¡Acomplejados!

En las redes sociales maldicen a Ollanta Humala por no haber anunciado el aumento del sueldo mínimo vital. Pero, cuando tienen que registrar sus ingresos extras a la Sunat para contribuir con el erario, quieren poner en sus boletas como si ganasen ese salario -hasta menos-. Y te desean felices Fiestas Patrias, con la tuya, no con la mía.

Otros peruanos reniegan del deficiente sistema en salud y en educación, pero cuando les piden cinco soles con una copia de DNI para ser atendidos, gritan que el Estado es explotador y que tanto en un hospital como en un colegio todo debe ser gratis, hasta el papel higiénico. ¿Con qué derecho manifiestan felices Fiestas Patrias si no quieren aportar ni medio sol al país?


Estimado peruano, deja de quejarte, haz patria cumpliendo con tus deberes. A quienes sí comprendo son a los compatriotas que hacen todo lo contrario a lo que pongo en esta columna, que quieren el desarrollo de su país de la mano con su trabajo y no son retribuidos como les corresponde. 

martes, 28 de julio de 2015

¿Qué viene para Humala y Heredia?



Ideele Revista
Carlos Basombrío Analista Político

Creo que pocas cosas significativas van a ocurrir en términos de gobierno en sus últimos 12 meses. No creo que en los grandes temas de economía, ni de seguridad ciudadana, puedan producirse mejoras importantes; ni siquiera tengo expectativas de que las normas que aprueben por facultades extraordinarias en lo segundo vayan a cambiar nada importante. A la vez las cosas positivas, como los programas sociales y las mejoras en educación, seguirán su curso sin mayores alteraciones, ni interferencias político partidarias, ni el gobierno ni de la oposición.

Para Ollanta y Nadine el último año estará marcado por cómo manejar el torrente de acusaciones contra ellos, derivadas del manejo de los fondos partidarios del 2006 al 1011, de la vinculación con Martín Belaúnde Lossio en distintos terrenos, del manejo frívolo de los ingresos y gastos de Nadine Heredia. No todas las acusaciones son graves, no todas las acusaciones serán ciertas, pero de ahí a sostener que todo esto es humo, hay un trecho inmenso.

El informe de la Comisión Belaunde Lossio será decisivo en el balance de esas acusaciones, al menos que otras cosas surjan en el camino. De ahí el operativo demolición contra una de las pocas congresistas dignas de su cargo que hay en este parlamento: Marisol Pérez Tello.

En paralelo, electoralmente, necesitan una bancada parlamentaria importante que le permita lidiar con la inevitable “mega comisión” que se establezca en el 2016 sobre Ollanta Humala y que, de refilón, por razones obvias del estilo de gobierno, caerá también sobre Nadine Heredia. Ello está virtualmente asegurado, ya que sus enemigos políticos más acérrimos, el APRA y el fujimorismo, tendrán más congresistas que ahora y quizás solos hagan mayoría.

Hasta ahora están apostando como locomotora para llevar vagones al Congreso, a un personaje impresentable como Daniel Urresti que les sirve además como ariete para atacar a sus adversarios, pero ha demostrado que además de sus gravísimos problemas judiciales ( que para mí lo incapacitan de partida) es absolutamente incapaz de hilvanar una frase que no sea de insulto y que vaya a la propuesta consistente de gobierno. Hay que tomar en cuenta, además, que Urresti genera discordias en el partido Nacionalista, que muy probablemente perderán más congresistas en los próximos meses y que los ex nacionalistas irán en distintas listas buscando nuevos destinos, lo que complica todavía más las posibilidades electorales.

Por ahora el personaje no pasa el 3% en las encuestas es decir no pasa la valla que se necesita para el Congreso y, por tanto, no tendrían bancada parlamentaria. Difícil que consigan a alguien más presentable y con mas appeal electoral que sirva para pasar la valla, pero que sea a la vez ingenuo y soberbio como para creer, como Urresti, que va a ganar.

Algo de eso podría cambiar si Nadine Heredia opta por ir a las elecciones parlamentarias y arrastrar en Lima un número suficiente de congresistas que eventualmente, en el promedio nacional, les permita superar la barrera mínima. Difícil, pero no imposible. Por cierto dificultades similares pasaron Toledo y García y tuvieron bancadas mínimas en su momento.

Julio de 1916 a julio de 1917 será por tanto una etapa dificilísima para la, por entonces, ex pareja presidencial. Ya no tendrán los resortes del poder, pero si la lupa sobre ellos y regresarán, además de los mencionados, López Meneses, la DINI, los pañales, etc. Además por ahí. igual que Toledo y García, tienen sus problemitas con la corrupción de empresas brasileras. 

Hay gente que rumorea que se escaparán a Francia para evitar el aluvión. Yo creo que eso es imposible: ningún país democrático aceptaría ser refugio de personas que huyen por acusaciones de corrupción.

¿Posibilidades electorales luego del 2017? ¿Quién sabe? Si Alan García después del 85 al 90 resucitó, cualquier cosa puede pasar en el Perú. Aún así lo veo difícil, las izquierdas difícilmente, creó, volverían a auparse al carro de Ollanta Humala como lo hicieron ingenuamente en el 2011 y las derechas nunca gustaron del comandante.