jueves, 10 de noviembre de 2011

Caillaux: “Me molesta perder el tiempo en estupideces”

Ministro de Agricultura perdió los papeles en Comisión de Fiscalización. Cuestiona que lo investiguen por presunto conflicto de intereses.
No es la primera vez y todo indica que tampoco será la última. Nuevamente, el ministro de Agricultura, Miguel Caillaux, hizo gala de su poca tolerancia y de sus malos modales. ¿El motivo de sus exabruptos? La investigación que lleva a cabo la Comisión de Fiscalización del Legislativo sobre diversos casos en los que el empresario ganadero y miembro del gabinete habría incurrido en conflicto de intereses.


En esta ocasión fueron las interrogantes sobre la adquisición de 1,200 hectáreas de terreno en el proyecto Olmos, a través de su empresa Negociación Agrícola Jayanca, en 2001, las que sacaron de sus casillas al ministro, quien acusó a los legisladores de “satanizar” a los empresarios y dar la imagen de que se trata de “corruptos e ineficientes” que llegan al Estado para negociar.

“Nos molesta realmente que nos hagan perder el tiempo con estas estupideces”, sentenció, y aunque luego ofreció disculpas, no dejó de quejarse porque –según dijo– desde que asumió el cargo ha dedicado gran parte de su tiempo para buscar las pruebas que sustenten sus descargos.
PRUEBAS AL CANTO
Virgilio Acuña, de Solidaridad Nacional, no obstante, dio cuenta del informe de la Contraloría que recomendó abrir proceso judicial por la venta irregular de estos terrenos y sobre el hecho de que el presidente de la comisión encargada de esa operación, Fernando Cillóniz, es hermano de dos socios del ministro, tras lo cual demandó a Caillaux a que defina “si se pone al servicio del Estado y del país o se pone como empresario”.

Este emplazamiento tampoco fue del agrado de su interlocutor, quien tras indicar que trabaja “bastante más horas de las que dice la ley”, comentó que, desde que asumió el cargo, solo ha visitado una vez una ganadera. “Fuimos a ver vacas, si les gusta los puedo llevar”, ironizó.

Sus comentarios merecieron las críticas de varios congresistas, entre ellos la oficialista Cecilia Tait. “Vamos a seguir fiscalizando para que ni sus socios ni sus empresas trabajen para el Estado. Nosotros no queremos fastidiar, es nuestra función”, le aclaró, mientras que Juan José Díaz le reclamó moderación a Caillaux. “Ya mucho exabrupto. Un congresista tiene más responsabilidad y hasta más rango que un ministro porque lo elige el pueblo, sea cuidadoso con sus declaraciones”, subrayó.

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