Por: Humberto Campodónico
La espectacular bajada del
petróleo ha tenido –y sigue teniendo– consecuencias económicas y políticas a
nivel mundial. Veamos eso un poco más de cerca, incluyendo como afecta esta
baja de precios a la región Piura y algunos de sus principales distritos.
El primer punto es que los
precios bajan como consecuencia de cambios estructurales. De un lado, la
desaceleración económica ha reducido la demanda. De otro, nuevas tecnologías
han permitido la explotación del petróleo y del gas esquisto (“shale oil” y
“shale gas”, en inglés), en EEUU, principalmente. En solo 5 años ya se producen
4.5 millones de barriles diarios (MMBD), lo que ha reducido notablemente sus
importaciones de petróleo, que consume nada menos que 18.5 MMBD.
El segundo punto es, ¿cuánto
tiempo van a durar los precios bajos? ¿No era que la OPEP debía haber bajado su
producción para, de esa manera, disminuir la oferta y que los precios suban?
Pues no. Arabia Saudita ha “convencido” al resto de países de no usar esa
política, pues perderían mercados, que serían ganados por sus competidores.
Su estrategia sería hacer
quebrar a los productores de “shale oil”, cuyos costos de producción están
entre US$ 60 a US$ 70/barril (1), mientras que los de Aramco, la estatal saudí,
no superan los US$ 5/barril (sí, cinco). Inicialmente se estimaba que esto
podía tardar de uno a dos años. En el camino, los grandes perdedores son países
como Rusia y Venezuela, por su gran dependencia de los ingresos petroleros.
Pero la semana pasada, el
Departamento de Energía de EEUU (DOE) ha dicho que la fiesta de los productores
de “shale oil” en EEUU durará por lo menos hasta el 2020, pues hay más y
mejores innovaciones tecnológicas, lo que les permite resistir incluso los
actuales precios de US$ 50/barril. Agrega Maria van der Hoeven, Jefa del DOE:
“el ascenso del “shale” significa que la OPEP nunca volverá a la participación
de mercado que tenía antes de la crisis” (2). Caramba.
Vamos ahora al Perú, país
importador neto. La baja del petróleo implica una importante reducción de
precios, lo que ya se ha materializado. Pero, ojo, la balanza comercial
(exportaciones menos importaciones) casi no ha sufrido variaciones pues pasó de
–US$ 1,240 a –US$ 1,207 millones del 2013 al 2014 (Nota Semanal del BCR,
14/02/2015).
Pero la Región Piura sí tendrá
menor canon petrolero. En su último informe, el DOE pronostica los precios
promedio del 2015 y 2016 en US$ 55 y US$ 71, por barril, con sus variaciones
mes a mes. Hemos calculado que los ingresos de canon, que en el 2014 fueron de
S/. 686 millones, bajan a S/. 425 millones en el 2015, subiendo a S/. 531
millones en el 2016.
En la provincia de Talara, que
es la que más canon recibe, los ingresos bajan de S/. 67 millones en el 2014 a
S/. 42 millones en el 2015 y suben a S/. 52 millones en el 2016. Nótese que la
subida del 2016 no “recupera” los niveles del 2014.
Algo parecido va a suceder en
las otras regiones petroleras (y, también mineras porque han bajado los precios
de los minerales). ¿Qué hacer? Una primera reflexión es que en el Perú todo el
canon petrolero (y minero) se asigna el mismo año para ser invertido y no
existe una política de guardar “pan para mayo”. Esto se debe corregir ahora
para que las bajadas “cíclicas” de precios no tengan impactos tan grandes.
Segundo, el gobierno debe
romper el “chanchito” del Fondo de Estabilización Fiscal, que a fines del 2013
llegó a US$ 8,590 millones, para que se puedan seguir realizando las
inversiones programadas en las regiones, por los gobiernos regionales y las
municipalidades. Este es el momento de aplicar la política “contracíclica”. No
se debe esperar que comiencen las protestas. Guerra avisada no mata gente.
Tercero, el mecanismo de Obras
por Impuestos (que subirá de S/. 626 a 900 millones del 2014 al 2015)
debiera ser ampliado para que incluya también a las empresas públicas, lo que
hoy no permite la ley 29230. Así, Petroperú, que es una empresa pública de
derecho privado, podría invertir en Talara y otras ciudades. Lo mismo con otras
empresas públicas. No se les debiera discriminar, a menos que en el gobierno
estén pensando en su privatización.
Cuarto, las inversiones en
exploración de petróleo seguro disminuirán por los bajos precios. Y,
también, la producción se verá afectada, pues hay que agregar el impacto de las
regalías. Por tanto, es el momento de revisar esos contratos y pactar una
regalía variable, que comience con un nivel bajo y vaya subiendo a medida que
el precio aumenta. Eso permitiría que no comiencen los despidos masivos, que ya
se anuncian en Talara en varias empresas. Ojo.
Finalmente, los pronósticos de
precios de los “commodities” son solo eso, pronósticos. A lo que se debe
agregar que muchas veces la realidad las ha desmentido. Pero, “con esos
pronósticos hay que arar”, pues hay que tener capacidad de previsión. ¿No es
cierto?
(1)
Por ejemplo, el campo Eagle
Ford tiene un precio de equilibrio de US$ 42/ barril. Pero el campo Woodford
está en US$ 56, mientras que Wolfbone está en US$ 80/barril. Ver
http://www.oilvoice.com/n/The-oil-price-is-fallingbut-
so-is-the-breakeven-price-forshale/ 41d7259a25eb.aspx?src=related 2) U.S. oil
output ‘party’ to last to 2020. Ver
http://mobile.reuters.com/article/ idUSKBN0LE02O20150210?irpc=932
No hay comentarios:
Publicar un comentario