El
gobierno de Fujimori es el más corrupto seguido del primer gobierno de Alan
García: la encuestadora Datum
realizó un sondeo sobre los gobiernos más corruptos de la historia y los
peruanos ubican en primer lugar con un 29% al gobierno de Alberto Fujimori.
Los
peruanos lo tienen claro, ante la pregunta en el sondeo nacional de Datum sobre en qué gobierno
hubo o hay más corrupción en el país, un 29% respondió, sin dudas, que eso
ocurrió en el régimen del ahora sentenciado Alberto Fujimori. asimismo, un 18%
dijo que el gobierno más corrupto fue el primer periodo de Alan García,
mientras el 15% cree que fue su segundo mandato.
Más abajo
se encuentra el gobierno de Alejandro Toledo, con un 10% de personas que cree
que fue el más corrupto, seguido muy de cerca del actual régimen, el de Ollanta
Humala, con un 9% de respuestas. En otros resultados, la población nacional
indicó que las tres instituciones más corruptas en el país son la policía
nacional (50% de respuestas), el poder judicial (49%) y el congreso (48%).
Sobre
este punto es interesante ver el cuadro comparativo de Datum en el que se
aprecia la percepción de la corrupción en los poderes judiciales de los países
latinoamericanos. en ese cuadro, el Perú lidera el ranking con un 85% de
encuestados que señalaron que hay "mucha corrupción" en esa entidad,
seguida por el poder judicial de El Salvador (81%) y el de México (80%).
García y
Toledo caen
De otro
lado, en el mismo sondeo, realizado entre el 4 y 9 de octubre 2013 sobre un
universo de 1 200 personas, también se señala que la aprobación de los líderes
políticos a Alan García y Alejandro Toledo sigue disminuyendo. Si García tenía
una aprobación de 20% en setiembre, ahora registra un 18%, mientras que Toledo
descendió de 13% a 10%. En contraste, las aprobaciones de los ex candidatos
presidenciales Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski aumentaron en el último
mes, de 36% a 39%, en el primer caso, y de 35% a 39% en el segundo. El sondeo
fue encargado por Perú 21, Gestión y Frecuencia Latina, y tiene un margen de
error de +-2.8%, con un nivel de confianza de 95%.
Casi una tradición: La complicada tarea de demostrar la corrupción en los ex
presidentes
A pesar de las innumerables denuncias durante la
historia republicana, para la justicia peruana ha sido complicado demostrar la
corrupción a nivel presidencial.
Los últimos presidentes de la República parecen enfrascados en un
intento por demostrar a todo el país que el boom inmobiliario no solo es un
fenómeno de la clase media, sino que también los alcanza a ellos y a sus más
cercanos parientes.
A inicios de año se reveló que el ex presidente Alan García había
adquirido en octubre del 2012, un año después de dejar la presidencia, una casa
en Miraflores por 830 mil dólares. Días antes también se supo que la suegra del
ex mandatario Alejandro Toledo, la ahora famosa señora belga Eva Fernenbug,
compró una mansión en Las Casuarinas por casi 4 millones de dólares.
¿Qué significa eso? ¿Una secreta competencia por demostrar quién tiene
las propiedades más caras o la prueba de dinero ilícito? Más allá de las explicaciones
que cada uno de los ex presidentes ha dado sobre el origen del dinero para esas
compras, la ciudadanía tiene otro concepto. En el caso de Toledo, una encuesta
de Datum señaló que el 73% de encuestados creía que él era el verdadero dueño
de la casa de Las Casuarinas. Al igual, más del 50% de encuestados por CPI
opina que el último gobierno de García fue corrupto.
Pero la justicia no procesa ni sentencia en base a encuestas, sino a
pruebas.
El ex procurador anticorrupción Antonio Maldonado afirma que las
investigaciones a ex presidentes "son complicadas", porque se
necesita que los fiscales trabajen con un equipo de peritos de primer nivel en
una labor que puede tomar varios años porque los mecanismos financieros de
corrupción son cada vez más sofisticados.
Como se recuerda, para el caso del ex presidente Fujimori el Estado
peruano contrató a la agencia estadounidense Kroll a fin de rastrear posibles
cuentas en todo el mundo.
Luego de un arduo trabajo el informe dejó pistas; sin embargo, aún se ha
hecho difícil demostrar delitos de corrupción de Fujimori, salvo el del pago de
15 millones de dólares por CTS a Vladimiro Montesinos, por lo cual fue
sentenciado a 8 años de prisión.
La historia se repite
El historiador Antonio Zapata señala que la corrupción es una tradición
en nuestro país desde la época colonial.
"Nunca ha habido gobierno honesto en el Perú",
sentencia. "Durante la República, el mayor índice de corrupción se ha dado
cuando el Estado ha tenido ingresos a niveles extraordinarios",
explica.
Un ejemplo de ello es el propio fujimorismo, pues la privatización de
las empresas estatales permitió que el gobierno tenga mayores ingresos y los
malverse.
Pero Zapata reconoce que casi nunca se ha logrado probar la corrupción,
no solo por lo difícil que resultaba hacerlo sino porque el caso también
obedecía a acuerdos políticos.
Por ejemplo, las acusaciones contra el presidente Manuel Odría no se
investigaron porque fue una condición para que dejara el poder.
Sin retroceder muchas décadas, no se debe olvidar que los procesos
contra Alan García por varios casos derivados de su primer gobierno tampoco
llegaron a los tribunales debido a que prescribieron.
La lección de la historia: la plata llega sola, los procesos prescriben
y la gente olvida. "Lo importante es que haga obra", suele ser la
frase clave.
Fujimori está dentro los ex líderes más corruptos del mundo
El Informe Global de Corrupción, de la organización Transparencia Internacional,
ubicó al ex presidente Alberto Fujimori dentro de los siete ex líderes
más corruptos de la historia. El ranking señala que Fujimori habría malversado
fondos por 600 millones de dólares.
Sobre la corrupción durante el gobierno del presidente José B. Leguía
(1908-1912/1919-1930), se recuerda que una comisión del Senado norteamericano
demostró que su hijo, Juan Leguía Swayne, recibió en una oportunidad 415.000
dólares en sobornos de banqueros estadounidenses.
El ex procurador anticorrupción Antonio Maldonado refiere que en
el caso del chileno Augusto Pinochet, la justicia demoró ocho años en
investigarlo y encontrar pruebas de corrupción durante su dictadura.
El historiador Marcos Cueto indica que en nuestra historia hay un patrón
de corrupción recurrente que, lamentablemente, es tolerada por la población que
lo ve como algo normal.
Claves
el caso venezolano. El ex presidente venezolano Carlos Andrés Pérez fue
destituido de su cargo y sentenciado a dos años y cuatro meses de arresto
domiciliario por "malversación genérica agravada".
historia
y corrupción. Este martes se presentará en el IEP el libro Historia de la
corrupción en el Perú, escrito por Alfonso Quiroz.
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